El Archivo Municipal de Arahal sufrió en el año 1857 un trágico incendio cuyo resultado fue la pérdida de toda la documentación municipal. A pesar de ese grave contratiempo, en muchos archivos estatales y locales podemos encontrar originales y copias de algunos documentos de especial relevancia para la localidad, como es el caso que nos ocupa. El Privilegio de Villazgo e Independencia Jurídica, fechado en 1554, otorgó al pueblo una serie de privilegios y derechos con los que no contaba hasta el momento y, lo más importante, supuso la emancipación jurídica de Morón de la Frontera. En el Archivo Municipal disponemos de una copia digitalizada de gran calidad a disposición de todo el que quiera consultarla. El documento es un traslado del original y está conservado en el Archivo General de Simancas, en Valladolid, en el fondo vinculado a la Contaduría Mayor de Hacienda. Según señala Antonio Jiménez Pérez en su obra Notas Históricas de Arahal, el texto original estaba depositado en el Archivo Municipal de Arahal, registrado con la signatura número uno, no obstante, carecemos de otras fuentes que contrasten esta información por lo que no nos atrevemos a confirmar plenamente dicha afirmación.
Este tipo de privilegios son fuentes esenciales para el estudio jurídico, diplomático, heráldico y, sobre todo, histórico de las poblaciones que las recibieron, a lo que hay que unirle el valor simbólico y sentimental que poseen. Aparecen en un contexto marcado por las necesidades monetarias de la Corona lo que hizo que en muchos casos optaran por recurrir a la venta de jurisdicciones para recaudar lo que necesitaban (una práctica que por lo que parece era habitual durante el siglo XVI). En el caso que nos ocupa, tal merced fue concedida como agradecimiento a la ayuda económica que prestó Arahal a la Corona para el aprovisionamiento de las plazas castellanas en África. Esta carta de independencia sería la base sobre la que los alcaldes y procuradores se apoyarían en los diferentes pleitos y reclamaciones que tendrían lugar posteriormente. Están documentados los numerosos conflictos surgidos entre la Casa de Osuna y Arahal a raíz de este hecho.
Respecto a las características físicas del documento, debemos señalar que el soporte que presenta es el papel, careciendo de cualquier tipo de ornamentación, hecho quizás derivado de su condición de copia. Según hemos podido observar estudiando otras cartas de privilegio de independencia jurídica similares, la forma externa que presentan es muy representativa siendo magníficos ejemplares escritos sobre pergamino con portada a color y miniaturas (sobre todo en época de Felipe II). En este traslado se hace referencia al soporte del documento original (scripta en pergamino de cuero) y al sello (con nuestro sello de plomo pendiente en filos de seda a colores). El manuscrito está compuesto por dieciséis hojas de un tamaño aproximado de 32 centímetros de alto por 20 de ancho, está escrito en letra procesal y se conserva en buen estado.
Además de la independencia jurídica de Morón, la Carta también concedió a Arahal el título de Villa y con ello todos los derechos y mercedes derivados de tal privilegio. Dichos derechos deberán ser similares a los que gozan las villas de Morón y todas las que pertenecen al Conde de Ureña. Asimismo, el escrito avisa a la villa de Morón así como a cualquier villa del reino que no se entrometan ni perturben la dicha jurisdicción y ordena que los alcaldes y oficiales de justicia queden totalmente desvinculados de la jurisdicción çebil e criminal de Morón. Tras otra serie de disposiciones, la Carta se cierra con la data y la validación, refrendada por el Secretario Real.
Este significativo documento culminó una etapa en la que Arahal fue evolucionando hasta convertirse en un pueblo con el derecho a elegir a sus propios gobernantes y con una jurisdicción civil y criminal propia. Etapa marcada por una serie de hitos esenciales para entender su historia como, por ejemplo, la reconquista en 1248 por Fernando III el Santo, las cesiones a la Orden de Alcántara, al Marquesado de Villena y a la Casa de Osuna, así como la aparición del primer Concejo propio. A partir de entonces, Arahal aparece como un pueblo independiente que va forjando su identidad a lo largo de los años, lo que le conferirá una fuerte personalidad marcada por sus raíces pero también por su vocación universal.
Fuente:José Luis Moreno Delgado.Archivero del Excmo. Ayuntamiento de Arahal